Integrantes: Mariangel Flores, CI: 28512856 y Juan Millán, CI: 28374196
Los sistemas de producción industrial circular son fundamentales para cerrar ciclos biogeoquímicos y disminuir la generación de residuos mediante distintas estrategias efectivas. Una de las más destacadas es el reciclaje y reutilización de materiales dentro del mismo sistema, lo cual prolonga el uso de los recursos y disminuye la necesidad de extraer nuevos, lo que a su vez reduce el impacto ambiental derivado de la extracción y procesamiento de materias primas.
El diseño para la desmontabilidad también es esencial, ya que facilita la separación y reciclaje de componentes al término de la vida útil de un producto, contribuyendo a la recuperación de materiales valiosos y reduciendo residuos en vertederos. Como se ha señalado, este tipo de diseño es crucial para fomentar la economía circular.
El uso de materiales biodegradables es otra estrategia importante, ya que estos pueden descomponerse de forma natural sin dañar al medio ambiente, ayudando a cerrar ciclos biogeoquímicos específicos como el del carbono y nitrógeno. La implementación de energías renovables también es relevante, ya que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y favorece el equilibrio de los ciclos de carbono y oxígeno.
Finalmente, la práctica de simbiosis industrial, donde las empresas colaboran para utilizar subproductos de una como materia prima de otra, minimiza residuos y optimiza recursos. Estas estrategias en conjunto pueden transformar los modelos de producción hacia un enfoque más sostenible y eficiente.
Referencias:
Ellen MacArthur Foundation. (2013). Towards the circular economy: Economic and business rationale for an accelerated transition.
Stahel, W. R. (2016). The circular economy: A user’s guide.