Equipo 9: Jenny Montaño C.I: 28.655.159 y Samuel Gómez C.I: 31.275.075
La red trófica debe asumirse como un sistema complejo que propician estructuras de pensamiento de orden superior. La biosfera se encuentra inmersa en una era de devastación causada por los humanos para la obtención y explotación de recursos, muchas de estas actividades afectando a especies clave.
La reducción del tamaño poblacional de una especie, o su extinción, desencadena variaciones en los tamaños poblacionales de especies dentro de la red trófica. Como primer paso para la restauración, teniendo esto en cuenta, sería plantar especies nativas para recuperar la vegetación original, lo que ayuda a restablecer las interacciones entre plantas, herbívoros y depredadores. Sumado a eliminar o controlar especies no nativas que compiten o no conectan con las especies locales, afectando la dinámica de la red trófica, así como establecer corredores que conecten hábitats fragmentados, permitiendo el movimiento de especies y la interacción genética.
Siendo nosotros los humanos los principales causantes, debiéramos promover políticas que protejan áreas críticas y regulen actividades dañinas como la deforestación, contaminación, plantación de especies no conectadas a la red trófica, entre otras. Además de apoyar la investigación sobre las dinámicas de las redes tróficas y el impacto de las actividades humanas para desarrollar estrategias más efectivas.
Referencias bibliográficas: Montoya, J. M., Solé, R. V., & Rodríguez, M. A. (2001). La arquitectura de la naturaleza: complejidad y fragilidad en redes ecológicas. Ecosistemas, 10(2). https://www.revistaecosistemas.net/index.php/ecosistemas/article/view/313/308