Sistemas Abiertos y Cerrados, Isomorfismo, Modelos Sistémicos, Complejidad
de Cruz Hernandez - miércoles, 20 de noviembre de 2024, 16:36
La teoría de los sistemas proporciona un marco conceptual que permite interpretar la realidad como una serie de sistemas interconectados. Los siguientes conceptos profundizan en esta perspectiva y permiten comprender cómo funcionan los sistemas en sí y cómo interactúan entre sí
Sistemas Abiertos y Cerrados:
Abierto: Uno que intercambia materia, energía e información con su entorno. Evoluciona y se adapta en respuesta a los cambios externos. Es un organismo vivo, una empresa o una ciudad.
Cerrado: Uno que no intercambia materia ni energía con su entorno. Se mueve hacia el equilibrio como un sistema mecánico aislado.
Isomorfismo:
Contempla la existencia de estructuras o patrones similares entre sistemas aparentemente no relacionados. Una célula y una ciudad tienen una estructura. Ambas tienen sistemas de comunicación y transporte.
Modelos sistémicos:
Son modelos simplificados de sistemas reales, utilizados para comprender y analizar su comportamiento. Diagrama de flujo, ecuación matemática, simulación por computadora.
Complejidad:
Es la característica de un sistema con muchas partes interconectadas, donde los pequeños cambios pueden tener grandes efectos. Clima, cerebro humano, economía global.
Cibernética:
El Estudio de la comunicación y el control en sistemas complejos, en la naturaleza y la tecnología. Comportamiento de los termostatos, sistemas de control industrial, redes neuronales.
Retroalimentación:
Es un proceso en el cual la salida de un sistema se devuelve a la entrada, influyendo en el comportamiento del sistema. Un Termostato que regula la temperatura. Emergencia:
Se refiere a la generación de características nuevas y complejas en un sistema como resultado de la interacción de sus elementos. Estas características no se pueden explicar por la mera suma de las características individuales de los elementos. Por ejemplo la conciencia humana o la inteligencia artificial.
Al considerar estos principios, podemos descomponer y modelar sistemas complejos, reconocer patrones y prever comportamientos, en consecuencia, diseñar soluciones más efectivas para los problemas complejos que enfrentamos.